El aumento de la productividad refuerza el compromiso de “hacer más”, “usar menos”
La evolución de los agronegocios brasileños, sin duda, tiene un significado único para la posición destacada que el país ocupa en el escenario mundial.
La agricultura actualmente ocupa alrededor de 30.2% del territorio nacional, con 7.8% destinados a la producción de granos, frutas, hortalizas y cultivos perennes, 1.2% cubiertos por bosques plantados y 21.2% están destinados a pastos con 8% nativos y 13.2% sembrados.
La evolución de los agronegocios brasileños, sin duda, tiene un significado único para la posición destacada que el país ocupa en el escenario mundial. El aumento de la producción brasileña se ha debido mucho más al crecimiento de la productividad que a la expansión de la frontera agrícola, y ese es un factor relevante en la trayectoria del sector. De los 851 millones de hectáreas del territorio brasileño, cerca de 66,3% están cubiertas por vegetación nativa. La agricultura actualmente ocupa alrededor de 30.2% del territorio nacional, con 7.8% destinados a la producción de granos, frutas, hortalizas y cultivos perennes, 1.2% cubiertos por bosques plantados y 21.2% están destinados a pastos con 8% nativos y 13.2% sembrados. Los números en sí son suficientes para estar orgullosos y, no solo eso, sino todo el aporte tecnológico para que esta huella verde siga avanzando.
Brasil ya ocupa una posición de mérito en el escenario mundial de los agronegocios, pero será aún mayor si continúa implementando innovaciones tecnológicas y ampliando la sustentabilidad en los agronegocios. “Después de todo, el ADN de la agricultura brasileña está en el corazón de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, y esto no es una mera coincidencia, sino un reflejo de lo que ya ha sido entendido y hecho por el sector rural durante muchas décadas”, como se describe en un artículo de Mônika Bergamaschi que enfatiza la erradicación del hambre y la producción y el consumo sostenibles. De esta forma, se entiende que poner en práctica la sustentabilidad en los agronegocios es poder incrementar considerablemente la producción de alimentos, mejorando la seguridad alimentaria y asegurando que las generaciones actuales y futuras tengan satisfechas sus necesidades.
Preocupados por el bienestar animal, por la erradicación del hambre humana y por la contribución y el respeto del medio ambiente a YesSinergy® trae soluciones sostenibles producidas a partir de materias primas de fuentes renovables, como la caña de azúcar y la proteína de soja. En su complejo industrial, la empresa utiliza fuentes orgánicas de energía y vapor que reducen el daño al medio ambiente.
Como prueba de ello, la empresa cuenta con la Patente verde para la producción de minerales orgánicos, lo que representa una tecnología innovadora con un impacto favorable en el medio ambiente. “Este es un programa instituido por el INPI (Instituto Nacional de la Propiedad Industrial), en el cual una empresa que se adapte a sus requerimientos puede solicitar su inclusión. Analiza si su proceso de producción respeta y contribuye al medio ambiente. Este proceso de obtención de minerales quelados con aminoácidos de soya está patentado por Yes (Patente de Invención INPI: BR 10 2015 029707-6)”, comenta el Director Técnico Global, Carlos Ronchi.
“En Yes sabemos que preservar es actuar en el presente para garantizar el futuro. Hablamos de esto porque lo experimentamos en cada una de nuestras producciones”, concluye.
¡Nos apasiona la ciencia!
Fundada en 2008, la YesSinergy® combina el bienestar animal, la seguridad alimentaria y la sostenibilidad para producir aditivos naturales que reemplazan a los antibióticos para la salud y la nutrición de los animales. Desde 2016, YES forma parte de Aqua Capital, un fondo de inversión dirigido a empresas del sector agroindustrial en Brasil y Sudamérica.
FUENTES AUXILIARES:
https://www.embrapa.br/conteudo-web/-/asset_publisher/fHv2QS3tL8Qs/content/monika-bergamaschi/10180
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